Los niños muy pequeños son esencialmente emotividad y corporeidad, y estos son los canales a través de los cuales ellos comunican sus primeros sentimientos, como el bienestar o el malestar, la confianza o la desconfianza, la calma o la inquietud. Por esta razón los estímulos musicales para los niños deben ser ricos de contenido, y por sobre todo, deben integrar las diferentes y múltiples potencialidades de cada niño.
Nuestra propuesta es la de acompañar a los niños y a sus papáso educadores a descubrir, desarrollar y concientizar sus propios lenguajes expresivos, valiéndonos de actividades corporales, danzas, técnicas lúdicas y técnicas de masajes, donde la música es el medio principal, promoviendo la posibilidad de crear juntos, pudiendo así contribuir al proceso de crecimiento de cada niño y favoreciendo su capacidad de comunicación sobre todo en la fase no verbal, a través de este estímulo educativo de gran potencia, viviendo la música física y emotivamente
Hacemos hincapié en el respeto del espacio y tiempo de cada individuo para que cada niño pueda expresarse, crecer e interactuar libremente desde su expresión vocal, el uso de su cuerpo y sus emociones, el uso del silencio, la manipulación de los objetos, la exploración del espacio, la relación con los adultos, la socialización con sus coetáneos, la expresión individual y la participación grupal.
En cuanto a las mamas embarazadas, partimos de la base que el periodo de gestación es un momento en el que no solo se está constituyendo un ser humano, sino también importantes vínculos, siendo los padres, los principales creadores de la sonósfera (sonidos que nos rodean) de la nueva familia.
Nuestra intención es la de brindar dentro del taller ciertas herramientas utilizando los elementos anteriormente mencionados, a través de técnicas apropiadas al momento que esta viviendo la madre, o si se requiere, la pareja, con el fin de establecer un contacto de las mamás con ellas mismas, con sus compañeros y con sus bebés desde el mundo música
